lunes, 3 de agosto de 2015

Pique-nique

Es incríble la afición de los francess por los pique-niques. Los hacen todos los días por todas partes. Se puede ver a señoras mayores arrastrando su carrito como si fueran a la compra, pero no, se van de pique-nique. Los hay de pequeños, de grandes, de familias, multiculturales, de enamorados, de músicos.... Así que las chicas de mi clase y yo nos sumamos a la tradición ya que estamos haciendo una verdadera inmersión. (En la foto no se aprecia, pero nos está saliendo a todas una baguette incipiente debajo del brazo)


Y luego un paseíto por le Jardin Public.






Dimanche soir

Al principio fueron unos conciertos de reggae en un gran parque que hay en la orilla derecha del Garona y después el descubrimiento del arte alternativo de la ciudad. En unos hangares antiguos se ha creado toda una zona dedicada la street art, a los productos bio (auténtica pasión de los franceses) y el reciclaje a la vista de todo tipo de muebles fabricados con palés.


  








Y después, a la vuelta, la puesta de sol desde la otra orilla fue todo un regalo de esos que te llenan de energía positiva. Fuerzas renovadas para afrontar la próxima semana.




domingo, 2 de agosto de 2015

Paysage urbain

Estas puertas de entrada en las antiguas murallas de la ciudad se han convertido en su símbolo y parecen sacadas de un cuento. La primera es la Grosse Cloche (o la por todos conocida Campana Gorda), que lleva ahí desde el siglo XVIII y solo suena seis veces al año: el 1 de enero, el 1 de mayo, el 8 de mayo, el 14 de julio, el 28 de agosto y el 11 de noviembre y siempre a las 11h.
También sirvió alguna vez de prisón.


 La Porte Cailhau se construyó en 1494 para conmemorar la victoria de Carlos VIII en una batalla en Italia en esta plaza donde se supone que estaba el palacio de Leonor de Aquitania. Lo que no se sabe bien es qué significa "cailhau", se parece mucho a "caillou", que significa piedra, o podría ser un apellido.



Pero el sitio favorito de los bordoleses es Le mirroir d'eau (el espejo de agua). Es una gran esplanada construida para darle mayor importancia a la Plaza de la Bolsa, centro de negocios y transacciones en el siglo XVIII cuando el puerto de Burdeos tuvo su máximo apogeo con el comercio del vino y también de esclavos. Aunque aquí no les guste hablar de esto, Burdeos era el segundo puerto del mundo de comercio de esclavos después de Nantes. Los barcos venían sobre todo de Santo Domingo.
Resulta que cada 15 minutos empiezan a salir unos chorritos de agua del suelo hasta que todo se inunda unos 10 centímetros y los niños y no tan niños saltan en el agua como si esto fuera un parque acuático. Los hay que se vienen hasta con bañador y toalla... Es una de las fotos más típicas de Burdeos, sobre todo si consigues que los edificios de la Bolsa se reflejen en el agua.



Cinéma Utopía

Este es uno de mis lugares preferidos de Burdeos, el cine Utopía donde están echando ahora alguna peli española como La isla mínima o lo que ellos llaman "La niña de fuego", Magical Girl para nosotros, de Carlos Vermut. Se nota que a los franceses no les gustaba el título en inglés y le han puesto otro en español para que suene más auténtico. Cosas extrañas.
El edificio es una antigua capilla reconvertida en cine donde hay también una cafetería muy chula (ya decía yo que para algo útil iban a servir las iglesias).


El propio cine edita una revista con la crítica de las películas que están echando y no tiene desperdicio lo que dicen en ella del cine español. Según ellos, ahora que Podemos ha ganado protagonismo sobre todo en algunas capitales importantes, es posible que el cine español se recupere de la crisis y lleguen a las pantallas francesas buenas películas españolas. ¿Qué me decís de los gabachos? Estoy atónita.






Mon quartier

Y cuando paseo por mi barrio, seguramente el antiguo gueto de los marineros y comerciantes, polizontes y braceros del Puerto de la Luna, lleno de tabernas y prostíbulos dieciochescos en la época, suburbio de inmigrantes españoles y portugueses en los años 60 (mi tío Felipe vivió aquí de pequeño el mayo del 68), poblado ahora en su mayor parte por inmigrantes del norte de África y subsaharianos y convertido en una zona en recuperación para la ciudad, en estas calles, digo, vas andando y de pronto unos señores con chilaba regalan lechugas a todo el que pasa, hay librerías donde tomarse un zumo de frutas bajo la atenta mirada de un monstruo reciclado, almacenes "brocante" donde se encuentra casi de todo o los de la escuela de danza salen a mostrar lo bien que se les da la capoeira...




 

La dune de Pyla

Ayer fue un día estupendo en la que dicen que  es la duna más grande de Europa y la verdad es que impresiona. Al encaramarse arriba se divisa al mismo tiempo el océano y  los impresinantes bosques de las Landas.





Después nos fuimos a comer unos mejillones típicos (moules-frites) y acabamos mirando botellitas en una de las tiendas de vino de la ciudad. Estas son dos de mis compis de clase: Meg, de Nueva York, y María, de Ucrania.